
En un debate televisado en junio de 2021, afirmó con firmeza: «Sepan que a quienes sean responsables los vamos a perseguir nacional e internacionalmente con todas las vías de la ley, así que señor Piñera, está avisado».
En su discurso ante la 80ª Asamblea General de las Naciones Unidas, Gabriel Boric llamó la atención al exigir justicia internacional contra el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, por la crisis en Gaza. «No quiero ver a Netanyahu destrozado por un misil junto a su familia. Quiero ver a Netanyahu y a los responsables del genocidio contra el pueblo palestino enfrentados a un tribunal de justicia internacional», dijo Boric, generando aplausos y reforzando la postura chilena en defensa de los derechos palestinos.
Sin embargo, estas palabras resuenan con ecos de promesas de campaña que, según críticos, Boric no ha cumplido, como cuando amenazó con llevar al expresidente Sebastián Piñera a tribunales por violaciones a los Derechos Humanos durante el estallido social de 2019.
Tres Doritos después: pic.twitter.com/xTwotPrrfT
— Luis Bahamondes (@LuisBahamondes) September 24, 2025
Promesas de campaña bajo la lupa
Durante su campaña presidencial en 2021, Boric, entonces candidato de Apruebo Dignidad, hizo de la justicia por los abusos del estallido social un pilar de su discurso. En un debate televisado en junio de 2021, afirmó con firmeza: «Sepan que a quienes sean responsables los vamos a perseguir nacional e internacionalmente con todas las vías de la ley, así que señor Piñera, está avisado».
Esta advertencia apuntaba a las más de 8 mil denuncias por violaciones a los Derechos Humanos durante las protestas de 2019, que incluyeron torturas, detenciones arbitrarias y uso excesivo de la fuerza por parte de Carabineros.
Sin embargo, tras asumir la presidencia en marzo de 2022, Boric no cumplió nada de lo que prometió en campaña. No impulsó acciones judiciales directas contra Piñera, quien falleció en febrero de 2024, dejando un vacío en las expectativas de quienes aguardaban justicia.
En la ONU quiere ver a Netanyahu enjuiciado y el Chile les pasa La Moneda a los sionistas para que hagan su Januca.
— Simona 🍉 Kiltra (@CHUCKY_MUSTAINE) September 24, 2025
Payaso.
El paralelismo entre ambos casos es inevitable: tanto con Netanyahu como con Piñera, Boric ha utilizado un discurso contundente, prometiendo rendición de cuentas en tribunales internacionales. No obstante, en el caso chileno, las investigaciones judiciales han avanzado lentamente, con pocas condenas de alto perfil según datos de la Fiscalía Nacional hasta 2023, y la promesa de llevar a Piñera ante la justicia quedó en retórica.
Ahora, su llamado a un juicio internacional contra Netanyahu enfrenta el mismo escepticismo: aunque la Corte Penal Internacional emitió órdenes de arresto contra el líder israelí en noviembre de 2024, la ejecución de estas depende de una cooperación internacional que parece lejana, dados los complejos equilibrios geopolíticos.
Un patrón de palabras sin acción
El discurso de Boric en la ONU, aunque elocuente y alineado con su imagen progresista, reaviva las críticas sobre su tendencia a realizar promesas ambiciosas que no se materializan.
En Chile, sus seguidores más críticos señalan que, más allá de reformas institucionales y esfuerzos por la reparación a las víctimas del estallido, Boric no ha cumplido con la persecución judicial que prometió.
Este historial pone en duda la viabilidad de su exigencia actual, ya que la justicia internacional, como en el caso de la CPI, enfrenta obstáculos prácticos significativos.
Para muchos, las palabras de Boric en Nueva York son un nuevo capítulo en un patrón de retórica idealista que no se traduce en resultados concretos.
Mientras Boric consolida su voz en el escenario global, su credibilidad sigue siendo cuestionada en casa por aquellos que esperaban un liderazgo más resolutivo. La comparación entre su promesa incumplida contra Piñera y su actual demanda contra Netanyahu refuerza la percepción de que Boric domina el arte del discurso, pero tropieza en la ejecución, dejando a sus críticos preguntándose si esta nueva exigencia de justicia internacional quedará, una vez más, en palabras.
Chile no tiene ninguna necesidad de comprar armamento a Israel, cuándo tienen la FAMAE, que fabrica por ejemplo, bajo licencia SIG, una modificación del 550, etc. No hay excusas.
— Pablo Benavides (@ElPabloUltron) September 24, 2025