Al sargento Luis Bustos el mando le imputa haber “efectuado comentarios inadecuados respecto de los oficiales de su unidad”.
Un carabinero que, en el marco de un control de rutas, cursó una infracción a un oficial de su misma institución uniformada terminó siendo expulsado de la institución.
Así lo divulgó esta noche de martes en una nota exclusiva el noticiero 24 Horas de Televisión Nacional.
Según consigna la nota del periodista Santiago Pavlovic, todo comenzó la noche del 2 de febrero de este año, cuando el capitán Alejandro Sáez Ortiz, subcomisario de Arauco, fue sorprendido en el auto de su esposa conduciendo en evidente estado de ebriedad por parte de sus propios compañeros.
Para su mala suerte, el procedimiento fue grabado por un civil que pasó por el lugar, aun desconociendo que el conductor que estaba siendo controlado era un policía uniformado.
Según el registro, se alcanza a escuchar que el sargento Luis Alejandro Bustos que le ordena al conductor “abre la puerta hombre”, también sin saber la calidad del conductor.
Tras ello, Bustos advierte que se trata de un oficial, pero de igual modo prosigue con el procedimiento, con estricto apego a la ley que no hace diferencias.
“Présteme las llaves”, le dice Bustos insistentemente y el controlado le responde: “¿a ver qué pasó?… no sale, sale, sale”. Tras ello, accede a entregar las llaves y el sargento le indica entonces “usted nos va a acompañar”. “Cómo que los voy a acompañar, estoy manejando viejo”, es la desafiante respuesta que recibe.
Pero, al parecer, esto no fue bien visto en la institución y esta semana se conoció un documento que informa de la separación del servicio al sargento que tenía más de 19 años en la institución.
Argumentos
En él, se señala que el sargento Bustos “ha efectuado comentarios inadecuados respecto de los oficiales de su unidad y que manifestó evidente animadversión, dando un trato inadecuado al capitán Sáez, sin dar cumplimiento oportuno a los protocolos de actuación contenidos en los manuales de procedimiento institucional”.
Al sargento Bustos se lo sanciona también por haberse entrevistado con el fiscal local, por lo cual habría demostrado “deslealtad hacia el mando y la institución, menospreciándolos frente a una autoridad del Ministerio Público”.
Su abogado, Carlos Montanares, sostiene que se trata de una persecución “incluso con alevosía” porque a su representado se le ha dicho en forma verbal e increpado, además de cuestionársele la forma en que llevó a cabo el procedimiento policial. “Resulta paradójico que, incluso, Carabineros haya eliminado de las filas de la institución a este capitán y uno de los argumentos potentes fue la adopción de este procedimiento policial”.
Sin embargo, el comandante de la policía uniformada Álex Chaván no concuerda con el análisis del abogado, señalando que “aquí todos los carabineros somos iguales ante la ley, por lo tanto nuestras actuaciones… cada actuación es personal. Aquí especialmente en actitudes que tiene que ver con alguna indisciplina, no existe absolutamente ningún privilegio de grado, ni de persona”.
Para el capitán Sáez, quien rechazó someterse a un alcotest, también se ha propuesto la baja y en el documento respectivo se dice que “al ser fiscalizado y estar bajo los efectos del alcohol mantuvo un comportamiento inadecuado con un vocabulario vulgar y grosero, contrario a la reglamentación institucional, negándose al procedimiento y configurando con su actuar faltas graves a la disciplina de tal magnitud que lesionan gravemente la moralidad funcionaria y el prestigio de Carabineros de Chile”.
Según TVN, con esta sanción “queda la duda de cómo debiera actuar un carabinero frente a un oficial ebrio y grosero que se niega con prepotencia a un procedimiento normal en estos casos”.
Por nuestro medio asociado Nación.cl